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Utilización de las feromonas maternales porcinas desde gestación confirmada hasta parto para la reducción del estrés y la agresividad

CTA - 14 Mar, 2025

Código DRU: TRF2024GA0004

Entidad / Contacto: SIB-PMA S.L.

Localización de la actividad: Zaragoza

El estado actual de la producción porcina destaca la importancia crucial del bienestar animal tanto para la salud de los animales como para la calidad de los productos finales. Por ello, los productores buscan continuamente maneras de mejorar las condiciones de vida de los cerdos.

La fase de gestación de la cerda hasta el parto es un período crítico en la producción porcina, donde el bienestar de las cerdas tiene un impacto directo en la salud y calidad de la camada, así como en la eficiencia general del sistema de producción. Durante este período, las cerdas experimentan una serie de cambios fisiológicos y comportamentales significativos, lo que las hace más susceptibles al estrés y la agresividad. El estrés y la agresividad en este período pueden tener consecuencias negativas, como la reducción del apetito, el aumento de la incidencia de lesiones y enfermedades, así como un impacto negativo en la calidad de la camada y la supervivencia de los lechones.

Además, de acuerdo con la Ley de Bienestar Animal de la Unión Europea a partir del 1 de enero de 2013 (Consejo de la Unión Europea, 2008), las cerdas deben ser sacadas de las jaulas para ser puestas en grupos en parques a los 28 días de la cubrición y mantenerse en estos hasta una semana antes del parto, momento en el que serán desplazadas a las salas de maternidad. Al reagrupar en parques a las cerdas a los 28 días se ha visto que las cerdas son llevadas a un ambiente de alto estrés social, especialmente en el caso de las nulíparas/primíparas ya que no tienen ninguna experiencia previa y tendrán que pasar además un periodo de entrenamiento para poder aprender el funcionamiento de los comederos. A todo esto, se le suma la necesidad que tienen de mantener una jerarquía social dentro del grupo. Para establecer esta jerarquía las cerdas se pelean en numerosas ocasiones a lo largo del día, concentrándose un mayor número de disputas los primeros días tras reagruparlas y de madrugada cuando los comederos vuelven a ponerse en marcha.